Johann Wolfgang von Goethe
La comunidad de españoles en Berlín es bastante grande. Al llegar me dijeron que podíamos ser más de 400 solo de Erasmus, aunque me pareció un poco exagerado. Quién sabe. En fin, lo cierto es que es muy normal ir por la calle y oír hablar en español. Al principio me paraba en cada grupo a saludarles, pero con el tiempo lo vas dejando. No obstante, aunque estén hablando en alemán, inglés o cualquier otra cosa, tú lo sabes, y ellos también.
Como reconocer a un español en Alemania:
- Tira las colillas, servilletas y palillos al suelo sin la menor preocupación.
- Recuerda lo que es una persiana.
- Tiene un 50% de posibilidades de tener un pañuelo palestino.
- Sabe distinguir un pijo y una pija y cómo reconocerlos.
- Va a comer a las 3, y a cenar a las 10, cuando las cocinas de los restaurantes ya están cerradas.
- Se le oye. Normalmente los lugares públicos parecen velatorios, y a los españoles se les oye hablar en el bar, en el museo, en el tren…
- Le es perfectamente normal añadir limonada a la cerveza, o coca-cola al vino ¡pero de coca-cola a la cerveza ni hablar!
- Para salir de fiesta, no antes de las 11 de la noche.
- Es el que más quejas por ruido acumula en la urbanización, la residencia, etc…
- Si se queda a las 8, no muestra arrepentimiento por llegar a las 8:15. Y si es una fiesta, pues a partir de las 11, como no.
- Si va en grupo a la discoteca, forma un corro y a bailar. El corro es inamovible. Y si la canción tiene letra, se canta.
- Si lleva poco tiempo, va buscando dónde picar el ticket del metro, aún sorprendido de no haber visto puertas de control.
- Si lleva mucho, se estremece de morriña cuando oye la palabra “jamón”.
- Sabe lo que es un bocadillo, y no esas guarrerías que venden en los Subway y sitios del palo.
- No hace más que soltar tacos. ¡Con lo bien que suenan!
- Si saca un cigarro, ofrece a los demás.
- Eso de escribir las cosas de una manera y pronunciarlas de otra no lo lleva nada bien. Daughter se dice “Daugter”.
- Cuando ríe se nota.
- Muestra sorpresa y satisfacción cuando, al pedir la cuenta en un bar, el camarero espera junto a su mesa desde que la trae hasta que la pagas, y además llevando cambio suficiente por si los clientes quieren que se les cobre de uno en uno.
- Cuando saluda a una mujer, le da dos besos.
- Cuando va a ligar, no hace más que decirles a las chicas que es muy normal dar dos besos (las españolas también hacen lo propio).
- Si en un grupo hay “x” extranjeros y dos o más españoles, estos hablan en español entre ellos sin ningún problema.
- “Joder” y “Puta madre” son expresiones internacionales. No las abandona, las integra en la lengua extranjera.
Pero ojo, por esto puede uno pensar que los españoles en realidad somos unos guarros y unos maleducados. Nada más lejos de la realidad. Los españoles somos de la gente más abierta y amable, y (los que lo intentan) se integran muy bien en la sociedad alemana.
En definitiva, muchas cosas son geniales en Alemania, pero cuando estas lejos de casa echas de menos esos pequeños detalles que no dabas importancia, pero que resulta eran los que hacían el día a día. Me habré dejado un montón de formas más de reconocernos: ¡dejarlo en los comentarios!
Un saludo a todos. Tomaros un bocadillo de calamares a mi salud, y cantar una canción por la calle cuando el sábado vayáis de un bar al siguiente.