(Fuente imagen: La Opinión de Málga)
Que el negocio es lo primero para las operadoras, ya lo sabíamos. Como para el resto de empresas. Lo que ya no es tan normal es el cómo y a costa de quién. Ellos mismos dicen que es a costa de nuestra salud, ya que dicen desde el 2002 que es otra causa más que "contribuye a que se muera" tanto el usuario como el no usuario de telefonía móvil.
Por ello, la semana pasada han comenzado a pasar las operadoras Telefónica Móviles, Orange y Vodafone por el banquillo de los acusados del Juzgado de Instrucción nº1 de Móstoles. Un vecino les ha acusado de "homicidio y lesiones imprudentes" por el centenar de casos de cáncer registrados (Fuente: Invertia), 40 de ellos fallecidos, desde 1997, en un barrio de dicha localidad madrileña. Además también les ha acusado de "estragos a la salud y la seguridad colectiva, de actividad clandestina y de emisiones perjudiciales al medio ambiente". Asimismo, la denuncia va también dirigida contra las comunidades de vecinos "consentidoras" de la instalaciones de las antenas, además de contra el Ayuntamiento por permitirlo.
Por otra parte, también hemos sabido que la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha abierto a mediados de este mes un expediente sancionador a las mismas operadoras (Fuente: El País) por haber realizado presuntamente una subida coordinada de sus tarifas. Actividad claramente ilegal y denunciada por varias organizaciones de consumidores. Éstas estiman que habrían podido obtener unos ingresos de forma abusiva en el 2005 unos 1.208 millones de euros por el famoso redondeo...
Ya vemos que el negocio es lo primero, a cualquier costa.