(Fuente imagen AECC)
Hoy, 19 de octubre, es el día contra el cáncer de mama. Desde aquí queremos apoyar cualquier iniciativa que trate de evitar de forma preventiva cualquier tipo de enfermedad.
Sin embargo, también queremos denunciar la falta de coherencia de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), que es la promotora de esta última campaña de sensibilización. Esta misma Asociación, difundió en su día una publicación acerca de los campos electromagnéticos (CEM), cuyas conclusiones asombraron a más de un científico. Según la AECC, no pasa nada, los CEM no afectan a la salud y menos pueden inducir algún tipo de cáncer.
Al margen de los lobbies que presionan para silenciar informaciones que opinan todo lo contrario (Fuente: Periódico Diagonal), queremos recordar a la AECC que el informe Bionitiative, respaldado por la Agencia Europea de Medio Ambiente, deja bien claro que los CEM sí son un factor de riesgo para desarrollar un cáncer de mama. Y "existe una evidencia documentada (y bastante contundente en estudios sobre mujeres en el puesto de trabajo) para conectar el cáncer de mama y la exposición a los campos electromagnéticos". Los autores de este estudio recomiendan como elemento preventivo, que las personas traten de reducir estas exposiciones, sobre todo en entornos donde hay radiaciones de forma crónica.
Por si tienen algo más de tiempo, recomendamos un estudio minucioso de Marina Pollán titulado OCUPACIÓN, EXPOSICIÓN LABORAL A RADIACIONES ELECTROMAGNÉTICAS Y CÁNCER DE MAMA, editado en el 2001 por el Instituto de Salud Carlos III y el Ministerio de Sanidad y Consumo. "Hay que considerar las radiaciones electromagnéticas como posibles agentes promotores del cáncer mamario". Dixit est, Sres. y Sras. de la AECC. Lo que no sabemos (o no queremos saber) es por qué se empeñan en negar evidencias científicas y actuar en consecuencia, pensando en la utilidad que tiene hacerlo de forma preventiva, ya que es vital sobre todo en este tipo de cáncer.