Se acerca el invierno, y con el los fríos. Pero justo antes de su llegada es el momento de cosechar y de disfrutar de sus frutos. Como ocurre con las calabazas, aunque poco a poco fueron desplazadas de nuestra mesa y nuestros cocidos por la patata, a pesar de ser esta de inferior sabor.
Pero aun podemos darle uso. ,En cocina, la calabaza se utiliza para hacer mantequilla vegetal, tartas, flanes, panes, galletas y sopas.
Ademas nos duraran casi hasta la temporada siguiente. Para su conservación hay que secar las calabazas en la sombra, en lugares en donde la temperatura no baje de 12 grados y sin humedad.
Rindamosle ahora que se aproxima Halloween, el merecido homenaje haciendo un pastel, una mermelada o simplemente añadiendo a nuestros guisos a tan agradecida hortaliza. No dejemos que desaparezca, con su multitud de variedades de nuestras huertas.
Para ver una buena representación de algunas de sus múltiples variedades, sobre unas 40, podemos pasarnos por el Jardín Botánico Atlántico de Gijón. Durante 9 días el Jardín Botánico estará dedicado a la calabaza, con numerosas actividades entre las que se encuentran el I Concurso de calabazas gigantes.