Siguiendo con vegetales de cultivo fácil hoy vamos a hablar de las lechugas y las hojas para ensaladas.Las lechugas y otras hortalizas de hoja para ensaladas son plantas herbáceas de la familia de las asteráceas con pocas ramificaciones y raíces profundas. Se trata de hortalizas anuales, y las diferentes variedades se cultivan en distintas estaciones. Pueden tener diferentes formas y colores y plantarse a cubierto o al aire libre. Algunas de las variedades más cultivadas son la lechuga Batavia y la achicoria; y las lechugas cultivadas al aire libre pueden ser coloradas, verdes o rubias. Si el espacio del que se dispone es limitado, es útil saber que algunas variedades son ideales para el cultivo en balcones: se trata de las lechugas de cortar o de hoja ( se consumen sin falta d formar cogollo) como la " Red Salad Bowl". Tanto para el principiante como para el agricultor con experiencia, antes de la plantación deben respetarse algunas condiciones relacionadas con la calidad del suelo y con el lugar elegido para la plantación. Así, para evitar que temperaturas extremas puedan afectar la floración hay que elegir un medio aireado y de preferencia soleado. El paso siguiente es preparar el espacio elegido para la siembra. Para ello hay que trabajar la superficie del suelo y cavar un pequeño hueco de 5 a 10 cm de profundidad. Para asegurar resultados óptimos conviene además añadir compost, salvo que el suelo ya sea muy rico, en cuyo caso sería contraproducente. Por último, coloque la mata enterrándola hasta 2/3 de su altura. Cada mata de lechuga debe plantarse a una distancia de 25 a 30 cm de las otras. La cosecha se realiza generalmente 3 meses después de la siembra para las lechugas que necesitan acogollar y unos 21 días para las hojas de cortar.Las lechugas deben ser regadas con regularidad pero moderadamente. En verano, cuando el sol seca el suelo, el riego debe hacerse en la mañana antes del amanecer y más abundantemente. Si las plantas son todavía jóvenes, deben recibir una cantidad de agua de 3 a 4 litros por metro cuadrado. Durante la fase de desarrollo de los cogollos, la cantidad de agua debe aumentar hasta llegar a 10 litros por metro cuadrad, pero sin mojarla planta para evitar enfermedades como la botrytis. Además, en paralelo con el riego, el desherbado debe igualmente ser sistemático, pues sufren la competencia con las hierbas adventicias. Evita plantar las lechugas en el suelo junto a rábanos, guisantes, repollos y judías. En cambio, las lechugas crecen mejor si se las planta junto a las zanahorias, pimientos, tomates, berenjenas o melones.
Sus principales enemigos son las babosa y caracoles, sobremanera cuando son jóvenes. Para reducir sus ataque procuro trasplantar las lechugas del semillero un poco crecidas.