En el año 1864, en la ciudad alemana de Leipzig se creo la que hasta ahora se considera la primera asociación de hortelanos urbanos. Se fundó para reclamar espacios de juego y de aire libre para los niños, que dada la distribución de las ciudades de la revolución industrial eran escasos o nulos. Estos lugares de entretenimiento eran huertos para que cuidasen los niños, pero pronto se vio que era demasiada la carga de trabajo para ellos, pasando a hacerse responsables las familias de dichas parcelas. Poco a poco se fue extendiendo por otras ciudades de tal forma que se reconoció legalmente su obligatoriedad a incluir los huertos urbanos en las ciudades.
Fuente: Agricultura urbana: Un aporte a la rehabilitación integral. Nerea Morán