¡No estoy muerto!

Queridos lectores, he de pediros disculpas por este mes de sequía en el blog. Os he tenido en mente todo este tiempo, pero el mes de marzo no ha sido muy propicio para prestaros la atención que merecéis.

La primavera ha llegado, el sol empieza a mostrar su cara, la ciudad va despertando de su hibernación y yo me he ido al paro. Así que entre curriculum y curriculum iré escribiendo un poco por aquí mis estrambóticas aventuras.

¡Un abrazo a todos! ¡Nos vemos en la cola del paro!