Es la segunda vez que celebro mi cumpleaños en Berlín, y para empezar a crear tradición, volví a invitar a mis amigos a paella.
Lo cierto es que nunca falla. Si dices que vas a hacer una paella la gente se queda encantada, a pesar de que no se haga en una paellera, sólo lleve alitas y muslos de pollo o se te queme un poco.
Pero la comida fue lo secundario. Nos juntamos la panda italo-mexicano-portuguesa-española en mi casa y pasamos un buen rato, olvidando lo lejos que estamos de casa, y compartiendo siempre las cosas que nos la recuerdan.
Aquí unas fotos. Lo pase muy bien chavales. Mención especial a Laura que nos preparó una estupenda tarta de chocolate. ¡A todos gracias!
La panda
Brindis tuti-fruti
La tarta
Vittorio
Marco
Maria, el nuevo fichaje
Postre y cigarro
Papel de cocina, imprescindible en cualquier fiesta
Elena y Carla
Iria y Antonio
Sólo los que estuvieron aquí entenderán esta foto.